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11 de enero 2013. El consumo de alcohol se incrementa un 30% durante las vacaciones y los protagonistas de esta estadística son los jóvenes. El período que comprende los meses de enero y febrero marca la recesión escolar en la Argentina. Durante estos dos meses la constante disponibilidad de tiempo libre y la posibilidad de encuentros grupales en hogares, bares, boliches o reuniones en la costa atlántica se presentan como variables que en la última década han incrementado e instalado el abuso de sustancias legales e ilegales como un hábito o costumbre entre los adolescentes.LA LOCURA DEL ALCOHOLEs decir el concepto juvenil de diversión durante el verano se asocia en gran parte al consumo de alcohol y las consecuencias de su ilimitada ingesta quedan reflejadas en la cantidad de pacientes jóvenes que llegan a las guardias de los hospitales, sufren accidentes de tránsito o son protagonistas de riñas callejeras que culminan con detenciones o internaciones por lesiones graves. Ante el incremento de esta tendencia que cada año sube sus estadísticas, el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires reconoció que las guardias hospitalarias en la costa atlántica tuvieron que ser reforzadas con la presencia de psicólogos y especialistas abocados al tratamiento y prevención del abuso de alcohol. Hasta el momento, cuándo sólo transcurrió una semana del comienzo del mes de enero, 177 personas fueron asistidas en las guardias de los hospitales por intoxicación alcohólica. Ante este cuadro de situación, el Ministerio de Salud decidió que en la temporada de verano los centros de salud del partido de la Costa reforzarán las guardias hospitalarias con mayor cantidad de personal que asistirá a los pacientes que hayan abusado del alcohol y sustancias psicoactivas desde las 20 hs a las 8 hs.En el marco de una campaña preventiva el ministerio advirtió que el consumo excesivo de bebidas alcohólicas genera “graves trastornos orgánicos y cognitivos con el correr del tiempo y además, pone en riesgo nada menos que la vida del consumidor y de quienes lo rodean”. MÁS JOVENES, MÁS CONSUMOLa problemática que atraviesa a los jóvenes y su relación abusiva con el alcohol no sólo comprende al período vacacional. Si bien, durante el verano las cifras se incrementan, este es un dilema constante y permanente durante todo el año. Un estudio médico realizado por el Jefe de Neurociencia del Fleni, Dr. Marcelo Merello y por el Jefe de Neurología Cognitiva del Fleni, Dr. Ricardo Allegri, determinó que los adolescentes de hoy han duplicado el consumo de alcohol en relación a las generaciones anteriores. El estudio se focalizó especialmente en el fenómeno de la “previa”, ritual juvenil que implica el consumo de alcohol en hogares particulares, pubs o bares antes de ingresar a los boliches bailables.OPINIONESLos profesionales determinaron una serie de las conclusiones en su investigación que llaman a la toma de conciencia y a la puesta en práctica de medidas inmediatas en torno al tema. “Los jóvenes que abusan de la ingesta de alcohol comprometen su desarrollo intelectual futuro, poseen mayores probabilidades de protagonizar accidentes de tránsito y pueden perder sus capacidades cognitivas, especialmente la memoria“, especificó el estudio. En el marco de la presentación de la investigación, el Dr. Merello agregó: “hoy los más jóvenes consumen 2 o 3 veces más alcohol que las generaciones anteriores. Esto es muy grave, y el alcohol, en su consumo sostenido y crónico produce enfermedad cerebral que afecta fundamentalmente a la memoria, al desarrollo intelectual y por ende a la oportunidad futura de estos jóvenes en el mercado laboral”.UN CAMINO DIABOLICOEl consumo de alcohol en los jóvenes compromete su presente y condiciona su futuro en su salud física y mental y en su desarrollo social, laboral y afectivo.La incidencia del uso y abuso de alcohol en la Argentina se presenta como uno de los índices más altos a nivel mundial. El 62.8% de los chicos en edad escolar, de 13 a 17 años, consumieron bebidas alcohólicas durante el 2012 y el 30% de los adolescentes de todo el país entraron en un estado de inconsciencia después de tomar en exceso. Estas cifras son el resultado de una investigación realizada por El Observatorio de Drogas, organismo dependiente del SEDRONAR, que evalúa y establece la prevalencia de las sustancias legales e ilegales en la población argentina pero su principal foco de análisis son los adolescentes ya que es el grupo más vulnerable y con mayor cantidad de adictos en las estadísticas poblacionales. Una comparación revela el alarmante crecimiento del consumo de alcohol entre los adolescentes argentinos. La Tercera Encuesta Anual a Estudiantes de Enseñanza Media, realizada por el SEDRONAR en el 2007, revela que en dicho año los adolescentes de entre 13 a 17 años el consumo de alcohol estaba en el orden del 40% y en la actualidad esta cifra creció a 62.8%. VIENEN CRECIENDOEn los últimos diez años el consumo y abuso de bebidas alcohólicas entre los adolescentes argentinos se ha incrementado de manera firme y sostenida. Hace una década atrás, la incidencia del alcohol entre los jóvenes representaba un 50% menos que en las generaciones actuales. En un contexto de constante crecimiento del consumo de alcohol entre los adolescentes se han incorporado ciertos hábitos y conductas que han generado la “naturalización” de la ingesta de bebidas alcohólicas. Es decir, gran parte de los jóvenes actuales lo han internalizado como una rutina. El 30.9% de los adolescentes que tomaron bebidas alcohólicas durante el último año lo hicieron estando solos en sus casas. Es decir, 3 de cada 10 chicos de 13 a 17 años que consumen alcohol han incorporado esta práctica como una costumbre cotidiana realizada en soledad. El incremento exponencial del consumo habitual de alcohol como factor de riesgo en el 2005 era del 10.3% y en el 2009 fue del 11.4%. En la actualidad estas cifras se han triplicado. LOS PADRES Si bien las campañas preventivas y sanitarias a cargo del Estado ocupan un rol central en el abordaje de esta problemática, los padres son el primer modelo y ejemplo de los adolescentes. La prevención comienza por casa. Inculcar hábitos saludables, establecer límites y comunicarse de forma permanente y efectiva con los hijos sin dudas, impacta de forma favorable en la conformación de su identidad. Las vacaciones son una excelente oportunidad para capitalizar el tiempo libre en un momento de unión, diálogo y capacidad de escucha entre padres e hijos. Pero, en la comunicación familiar es muy frecuente no saber cómo abordar o establecer pautas claras y efectivas, y para tal fin existe la información o una guía adecuada para favorecer y emitir un mensaje claro y con llegada a los más chicos.FUNDACION PROYECTO PADRESLa Fundación Proyecto Padres encabeza una campaña preventiva contra abuso de alcohol destinada a padres e hijos. La iniciativa llamada 'Padres Socialmente Responsables vs. Individualmente Correctos”, propone alentar a los padres a que tomen conciencia sobre su rol como agentes preventores de adicciones y lograr que se cumplan las leyes de la nocturnidad bajo el lema: “Más Padres, Menos Riesgos”.Las disertaciones se encontrarán a cargo de padres de han pasado por esta experiencia con sus hijos y profesionales y referentes en adicciones. El programa, se desarrolla de forma gratuita y no sólo contarán con la realización de conferencias sino que también se sumarán actividades integradoras, deportivas y recreativas que buscan recuperar el liderazgo social de los padres como agentes de cambio. El alcohol es absolutamente nocivo para la salud de los jóvenes y los adultos tienen la misión fundamental de jerarquizar su rol frente a sus hijos. Valores, límites y compromiso, tres funciones paternas y maternas que hacen la diferencia. Eugenia Plano | www.vidapositiva.com |
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