SILICIO ORGANICO

cio orgánico: propiedades y contraindicaciones

 

El silicio orgánico es un mineral esencial para la vida y la salud. Es uno de los responsables de aportar resistencia y fuerza a los tejidos de todo ser vivo, especialmente a los tejidos conectivos.

¿Qué es el silicio orgánico?

El silicio es un oligoelemento que después del oxígeno, es el segundo elemento químico más común en la corteza terrestre,  donde se encuentra en forma de silicatos que se filtran de forma natural en manantiales, ríos y lagos.
No todo el silicio es orgánico, también existen algunas formas inorgánicas como es el caso del dióxido de silicio, que en su estado natural es absorbido por las plantas a las que les aporta dureza y flexibilidad, y éstas a su vez los transforman en fotolitos, una forma orgánica que puede ser absorbida por los seres vivos, conocida como silicio orgánico.
El ser humano, sólo puede asimilar silicio su forma orgánica, existente en casi todas las partes del cuerpo humano y que es con la que nuestro organismo es capaz de crear tendones, cartílagos, uñas, huesos, dientes y músculos.
De ahí que el silicio orgánico sea tan utilizado en tratamientos cosméticos, ya que tiene la capacidad de restaurar las arrugas y flacidez de la piel, de fortalecer las uñas y la capacidad de aportar vitalidad al cabello.
En el mundo del deporte, también es habitual encontrarlo en forma de suplemento deportivo por su papel clave en la formación de huesos y tendones.

Propiedades del silicio orgánico

Ya el propio Pasteur, dejó constancia en sus estudios de la importancia del silicio orgánico para la salud, incluso predijo que se convertiría en un elemento químico clave, gracias a sus propiedades terapéuticas aplicables en muchos problemas de salud,  pero no fue hasta los años 70 donde empezó a investigarse más a fondo en su relación con la salud de huesos, cartílagos, dientes y piel.

Desde hace años ya se sabe con certeza que el silicio orgánico es esencial para formar y mantener los huesos sanos, para mantener una buena salud cerebral y de los vasos sanguíneos, así como que su ausencia es un motivo desencadenante de algunas enfermedades relacionadas con estos tejidos.

Por lo general, las propiedades del silicio orgánico ayudan a retrasar los efectos del envejecimiento en un amplio espectro de los tejidos del cuerpo humano, aunque sus propiedades y beneficios son muy diversos:

• Favorece la síntesis del colágeno y de la elastina.
• Mantiene la piel joven y elástica, previniendo arrugas y flacidez.
• Aumenta las defensas y fortalece el sistema inmunológico.
• Protege huesos y articulaciones.
• Mejora la asimilación de calcio, magnesio, fósforo y la formación de tejido óseo.
• Mantiene las articulaciones flexibles y evita el deterioro de cartílagos.
• Fomenta la recuperación de músculos y tendones.
• Actúa contra la hipertensión.
• Reduce los niveles de colesterol y protege la pared arterial.
• Previene la arteriosclerosis y otras enfermedades cardiovasculares.
• Es un potente analgésico y cicatrizante.
• Protege, rejuvenece y mantiene la piel saludable .
• Protege contra los radicales libres y la oxidación celular, manteniendo los tejidos jóvenes.
• Interviene en el metabolismo general del organismo.
• Aporta vitalidad al cabello.
• Fortalece uñas y dientes.
• Combate la psoriasis.
• Puede prevenir enfermedades crónicas ligadas a la edad.
• Calma la acidez de estómago y las úlceras.
• Su uso tópico ayuda a cicatrizar y calmar heridas, quemaduras y llagas.

Carencia de silicio orgánico

Aunque el silicio orgánico está presente en el cuerpo humano en cantidades muy pequeñas (1.4 gramos aproximadamente), lo cierto es que sin este oligoelemento, no hay vida.
Por desgracia, este mineral disminuye de forma irreversible con la edad, sobre todo a partir de los 40 años. Uno de los principales síntomas que presenta la carencia de silicio son los problemas en las articulaciones pudiendo derivar en enfermedades como la artritis y la artrosis.
Por ello, a partir de esta edad es importante mantener una alimentación saludable, rica en frutas y verduras y cuyos alimentos sean de calidad.
Si tenemos en cuenta que el silicio orgánico es esencial para asimilar minerales como el calcio, el magnesio y el fósforo, así como para realizar la síntesis de la vitamina D ya podemos hacernos una idea de lo que supondría una carencia de este oligoelemento, ya que derivaría hacia una carencia total de minerales al no poder ser metabolizados, provocando en consecuencia, un amplio abanico de enfermedades graves.
La aparición de picores y pequeños eccemas en la piel puede ser un síntoma de carencia de silicio que se puede agravar si esta carencia se mantiene.  La carencia de silicio afecta a la síntesis de colágeno de la piel, que al no poder formarlo hace que la piel enferme y deje de reparar los tejidos que la forman.
Esta debilidad de la piel también se puede notar de la misma manera en las uñas y el cabello, viéndose más frágiles y quebradizas.
El silicio también juega un papel importante con el tejido pulmonar por lo que una carencia podría provocar la falta de protección frente a necrosis, enfisemas y otras enfermedades pulmonares.
La carencia de silicio orgánico también propicia las tendinitis, esguinces, roturas de fibras musculares, huesos, cartílagos…  Y además hace que la curación de heridas, quemaduras y llagas se a mucho más lenta.
La falta de silicio también favorece la aparición de abcesos, forúnculosis y fístulas.